Siguenos:

» » ¿Quién inventó a zutano y a perengano?

Alberto 10 jun 2014 0 No hay comentarios


También te decimos si existe la fobia a los suegros.

Usamos fulano, mengano, zutano y perengano para designar a personas que no conocemos. De acuerdo con Marina Menéndez, profesora de Letras de la Universidad Nacional de La Plata, Argentina, se sabe que fulano y mengano vienen del árabe –fulano significa “ese” o “tal” y mengano, “quien sea”–, pero el origen de zutano y perengano es incierto.

Menéndez señala que en algunos países de América Latina, perencejo reemplaza a perengano; en la zona amazónica de Perú, peshuco equivale a fulano, y la expresión quechua imasuti, se usa cuando no se recuerda el nombre de la persona de la que se habla.

¿Existe la fobia a los suegros?

De acuerdo con especialistas, se trata de la socerafobia. “Es un miedo irracional creado por la mente, principalmente si hay baja autoestima”, comparte Steffano Castillo, autor de Estudio de las fobias humanas y su relevancia en la sociedad actual. El primer contacto con los padres del otro es parecido a un examen para ser aceptado en el nuevo grupo familiar. La fobia a los suegros consiste, esencialmente, en el temor o ansiedad de ser juzgado, criticado, ofendido delante de otras personas o, simplemente de no ser el compañero “ideal” que los suegros habían pensado para su hijo(a).

¿Hablar sólo es síntoma de desequilibrio mental?

No en todos los casos, y es tan frecuente que se puede decir que es una conducta normal. En opinión de la doctora Nancy Steinberg, psicóloga y psicoterapeuta, “en algunos casos, hablar solo es un signo de enfermedad mental, pero está acompañado de otros síntomas y no es el más importante de ellos. Por ejemplo, en la esquizofrenia, va acompañado de alucinaciones y delirios; la persona se aísla socialmente y sus ideas están desconectadas”, señala.

La conducta de hablar solo ayuda, según Steinberg y otros profesionales, a centrar la atención, disminuir el estrés, liberar las emociones, así como
a tomar mejores decisiones. Algunos especialistas en estrés postraumático, por su parte, aseguran que una excelente terapia para rehabilitarse emocionalmente es la de poner palabras a los sentimientos para, de esta manera, poder eliminar las malas experiencias que se han quedado en la memoria emocional.

Descubrimientos realizados en 2010 por los doctores en psicología Gary Lupyan, de la Universidad de Wisconsin-Madison, y Daniel Swingley, de la Universidad de Pensilvania, comprobaron que esta conducta beneficia la salud mental. El estudio se rea- lizó con un grupo de personas de diversas edades y sexo, quienes observaron 20 imágenes con diferentes artículos, al finalizar la secuencia de fotos se les pedía que buscaran uno de estos objetos.

En una segunda prueba, los participantes volvieron a hacer lo mismo, pero esta vez, mientras buscaban el objeto, también les dijeron que lo nombraran en voz alta o para sí mismos. Como resultado, los voluntarios pudieron encontrar en menor tiempo el objeto, lo que ayudó a concluir que el discurso autodirigido, en el aspecto visual, mejoró la memoria en los participantes e hizo que hallaran el objeto más rápido.

«
Siguiente
Entrada más reciente
»
Anterior
Entrada antigua

No hay comentarios:

Dejanos tu opinion