Un fetichista francés de 54 años fue condenado a 18 meses de prisión por introducirse a la fuerza en casa de una anciana en Belfort, al noroeste de Francia, para acariciarle, olerle y lamerle los pies a la mujer.
La mujer, que no se presentó a la audiencia judicial, hizo saber por vía de la fiscalía que fue víctima de violencias psicológicas por parte del intruso, identificado como Patrice Vergon. Según la edición digital del diario "L'Est Républicain", Vergon cuenta con antecedentes penales por agresión sexual.
Los hechos acontecieron en la madrugada del 16 al 17 de abril, cuando el agresor, alcoholizado y bajo los efectos de algunos ansiolíticos, llamó insistentemente al timbre del domicilio de la señora de 75 años a la que ya tenía localizada.
La mujer abrió la ventana de la cocina y Vergon se introdujo a la fuerza en su casa. El atacante evitó que su víctima alcanzara el teléfono, obligándola a dirigirse a su dormitorio, donde se dedicó a oler, lamer y acariciar sus pies.
La señora, sofocada, convenció a su agresor para que le facilitara un inhalador y aprovechó un descuido para pulsar el botón de alarma de su teléfono y alertar a su familia.
El asaltante se dio entonces a la fuga y se llevó consigo un par de zapatos de la anciana. Al día siguiente el agresor telefoneó a su víctima para disculparse, y fue detenido horas más tarde.
"No soy un violador, nunca paso al acto", reconoció Vergon ante el tribunal , quien dijo sentirse aliviado por haber confesado "su verdadera naturaleza".
Cuando los oficiales detuvieron al agresor en su casa, los zapatos estaban hechos pedazos para poder trasladarlos con facilidad al tribunal.
Su abogado, Leonardo Giagnolini, dijo al tribunal que dos años antes su cliente había comenzado a comprar vídeos pornográficos de carácter fetichista, aunque su obsesión por los pies de las personas mayores había comenzado a los 10 años de edad.
La fiscalía solicitó dos años de cárcel, que la sentencia rebajó a un año y medio. La pena se sumará a una de 18 meses pendiente de cumplimiento por agredir sexualmente a otra octogenaria.
Fuente: EFE