Enlistadas por la Sociedad Americana de Química:
1. Protección total: Tenemos a los condones, una forma barata y confiable de evitar los embarazos. Además, te protegen de enfermedades de trasmisión sexual. La mayoría de ellos están hechos de un polímero que se estira llamado látex, el cual se extrae de plantas y árboles. Los polímeros son grandes moléculas que a su vez están formadas por moléculas mas pequeñas llamada monómeros. En el caso del látex, los monómeros son “isoprenos” ( CH2=C(CH3)-CH=CH2 ).
2. Una ayudadita: Usados de manera adecuada, los condones evitan que los espermatozoides lleguen a su destino final, el óvulo. Pero cuando se tiene un condón a la mano, también se requiere de algo de lubricante para hacer las cosas menos ásperas, ya que demasiada fricción puede romper un condón y ..¡ups, espermatozoides al ataque!
Los lubricantes tienen distintas presentaciones: a base de agua, de aceite o de silicón. Todos ellos funcionan de la misma manera, reduciendo la fricción entre dos cuerpos que se frotan al mismo tiempo. Cuando dos superficies se rozan existen miles de pequeñísimas imperfecciones que causan fricción, pero al aplicar un lubricante se produce un película que previene el contacto de la imperfecciones que se encuentran en la superficie. Pero ¡cuidado! l Los lubricantes a base de aceite puede romper los condones debido a que los productos hechos de petróleo destruyen el látex.
3. Más placer: También existen aditivos que producen ciertas sensaciones, como el calor, la cual se produce gracias alglicerol. Incluso, algunos lubricantes contienen capsaicina, compuesto químico que se encuentra en los chiles.
4. Por si las dudas: El sexo seguro es lo primordial, pero también debe haber un plan B, ¿cierto? la pastilla del día siguiente es la respuesta. Este controversial anticonceptivo ha generado una gran cantidad de debates. La pastilla del día siguiente contiene una hormona sintética llamada levonorgestrel, la cual se une a los demás receptores de proteína, como el estradiol y la progesterona que hacen que una mujer sea fértil, pero en su lugar interrumpe la ovulación o detiene la fertilización. Se cree que la píldora del día siguiente incluso puede detener un óvulo que ha sido fecundado evitando que se adhiera a las paredes vaginales y se desarrolle el embrión.
5. Más vale antes: No olvidemos al químico Carl Djerassi, quien desarrolló los primeros anticonceptivos orales a base de progestina en la década de los 50. La progestina es la forma sintética de la hormona progesterona que combinada con el estrógeno puede controlar el ciclo menstrual de una mujer y prevenir la ovulación. Lo más importante es que este invento revolucionó las relaciones sexuales y fue aprobado por la FDA en la década de 1960.
No hay comentarios: