La venganza es un plato que se sirve frío, y eso es lo que ha hecho Pepsi con un periodista que acusó a la compañía de manipular una campaña publicitaria. El periodista afirmó que un antiguo spot de la marca era un montaje y no una cámara oculta.
El objetivo de la broma ha sido Travis Okulsky, el editor del portal web de Jalopnik, especializado en el mundo del motor y muy crítico con el anuncio de Pepsi. En este spot, el experimentado piloto de carreras Jeff Gordon se hacía pasar por un comprador en un concesionario. Cuando parece encontrar el vehículo adecuado convence al vendedor para que le deje probarlo. Los siguientes instantes del anuncio son de Gordon conduciendo de forma brutal y sin piedad alguna por su copiloto.
Pese a que el vídeo fue un éxito y ya acumula más de 40 millones de visitas, Okulsky y otros lo denunciaron como fraude, argumentando que no era una cámara oculta como tal, si no que estaba todo guionizado.
En respuesta a estas declaraciones, y tras un año de las mismas, Pepsi y Jeff Gordon unieron fuerzas de nuevo para gastar esta broma a uno de sus mayores críticos. Esta vez la compañía quería dejar claro que no se trataba de ningún montaje.
Para realizar esta broma tan pesada primero caracterizaron a Gordon para que no se le reconociese, dandole un aspecto de "tipo duro" para reforzar su coartada: taxista con antecedentes que ya ha pasado por la carcel. El periodista no tiene ni idea de la que se le viene encima y se sube al coche, donde entabla una animosa charla con el supuesto taxista.
Todo parece ir bien hasta que en un determinado momento aparece un coche de la policía que le da el alto al taxi. Jeff Gordon dice que no está dispuesto a pasar de nuevo por la carcel y empieza una espectacular huida de las fuerzas del orden. Como es de imaginar, Okulsky se muere de miedo durante todo este recorrido, donde no para de gritar que quiere irse y que pare.
El éxito del vídeo ha sido rotundo y ya acumula más de 12 millones de visitas.
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