Todas sabemos que el desayuno es la comida más importante del día y la base de una alimentación saludable. Pero a veces las mañanas son agitadas, con poco tiempo y apenas llegamos a comer algo rápido, y aunque no nos quedemos con el estómago vacío antes de comenzar el día, comer algo así nomás no es el mejor modo de desayunar. Hoy te damos algunos consejos sobre cómo tener un desayuno perfecto y comenzar tu jornada con la mejor energía.
Ideas para tener un buen desayuno
Bebidas calientes
Respecto a las bebidas, el hábito del café no es el mejor. En realidad depende de cuántas tazas de café y té negro tomas durante el día: lo ideal es no superar las 2 o 3 tazas. Algunas alternativas al café como la malta son una buena idea, o también puedes elegir un té de hierbas o té verde. Lo importante es que no sea tu único desayuno sino que acompañes tu taza de bebida caliente con hidratos de carbono complejos, fruta y proteínas.
Un hábito muy saludable en beber en ayunas un vaso de agua tibia con medio limón exprimido. Esta bebida tiene propiedades desintoxicantes y es un modo de preparar el cuerpo para el día.
Hidratos de carbono
Para obtener energía para tu día, lo mejor es elegir hidratos de carbono complejos con un índice glucémico bajo y evitar los hidratos refinados. Es decir: deja de lado los alimentos procesados con harina y azúcar refinada (bollería, pan, galletas) y ve por los cereales integrales. Algunas ideas: avena con frutos secos, granola con yogurt, tostadas de pan de harina integral o de centeno con mantequílla de maní o galletas de arroz integral.
Evita los cereales procesados en caja: tienen poco valor nutricional y traen mucha azúcar y provocarán que tu energía y el nivel de azúcar en sangre decaigan a media mañana, lo cual te hará tener necesidad de comer más cosas dulces.
Jugos naturales
Otra excelente opción para un desayuno perfecto son los jugos naturales hechos de frutas y vegetales frescos. Puedes prepararte licuados muy nutritivos utilizando toda la variedad de frutas y verduras que tengas, agregándole alimentos nutritivos como leche, semillas de sésamo, semillas de chía o espirulina. Comer frutas en formato de jugo es más saludable porque así obtenemos más cantidad de fibra.
Alimentos con proteínas
Una regla básica es que tu desayuno cuente con un buen aporte de proteínas. Para esto, una de las opciones más fáciles y versátiles son los huevos. Prepáralos de tu modo favorito: revueltos, poché, duros o en un omelette con queso. De hecho, si tomas la costumbre de desayunar alimentos proteicos como huevos con queso y vegetales notarás cuánta energía sentirás cada mañana.
Otras opciones de alimentos con proteínas pueden ser un sándwich de pan integral con queso, un yogurt con frutas, un puñado de frutos secos como almendras o nueces, unas galletas de arroz o waffle integral con mantequilla de maní.
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