El diario belga La Dernière Heure, indicó que los servicios del orden belga han sido informados de la posible entrada en su territorio de un dispositivo que aparenta ser un teléfono inteligente, pero que en realidad es un arma de fuego con dos cañones de calibre 9 milímetros.
Estos aparatos son fabricados por la empresa estadounidense Gun Runner Distributing y tienen un costo de 395 dólares. “No hemos encontrado ningún arma de ese tipo en Bélgica”, declaró hoy un portavoz de la Policía federal belga a EFE.
Según precisaron medios locales, la venta del arma, que plegada aparenta ser un teléfono móvil, está prohibida en Bélgica, pero existen vías de comercialización ilegal a través de internet que hacen posible su llegada al país.
El nombre oficial del producto es Ideal Conceal (que en inglés puede traducirse por “disimulo ideal”) y el fabricante anuncia que sus armas se venderán, a partir del primer trimestre de 2017, solo a quienes posean una licencia de tenencia de armas.
Fuente: noticias24
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