Las ratas y ardillas más grandes que los gatos eran a menudo objeto de historias fantásticas contadas por exploradores que visitan tierras lejanas y remotas islas de todo el mundo.
Ahora una nueva investigación ha confirmado lo que estas primeras historias surgieron de roedores que viven en las islas y que son 17 veces más propensas a convertirse en gigantes que en otras partes.
Los resultados ayudan a explicar por qué los roedores a menudo desarrollan proporciones monstruosas cuando viven en zonas aisladas del mundo y pueden incluso convertirse en depredadores feroces.
Por ejemplo, las ratas de arroz en la isla de Cozumel, frente a la costa de México y Guatemala, son más del doble del tamaño de los que viven en el continente.
Los ratones de los ciervos en las islas del Golfo de la costa de Vancouver también son dos veces el tamaño de los que viven en el continente.
Los roedores también han desarrollado un comportamiento inusual, se vuelven carnívoros, alimentándose de los polluelos de albatros que anidan en la isla.
El doctor. Paul Durst, biólogo de la Universidad de Duke en Durham, Carolina del Norte, quien dirigió la investigación, dijo que si bien hubo algunos ejemplos de roedores que tienen tendencia hacia el gigantismo.
"Una explicación para este fenómeno es que los individuos se vuelven grandes para evitar que el agua de las islas los arrastre lejos".
En algunas zonas del mundo ha habido una creciente preocupación por la evolución de los roedores gigantes que vienen de especies pequeñas que fueron introducidos por los exploradores humanos en el pasado.
Sin depredadores y con una abundancia de alimentos, estos roedores a menudo crecen en tamaño y pueden poner en peligro las poblaciones de animales nativos.
Los investigadores, cuyo trabajo se publica en la revista Proceedings of the Royal Society B , donde analizaron datos de más de 1.000 poblaciones de roedores de 60 especies diferentes de todo el mundo.
Las poblaciones en cada isla, sin embargo, son genéticamente diferentes entre sí, lo que sugiere que están evolucionando lentamente en especies separadas.
En otras partes del mundo, como la isla de Santa Catalina frente a la costa de California, las ardillas de tierra se han convertido en gigantes sin competencia por el alimento.
No hay comentarios: