Cirugías estéticas hay muchas, y mujeres que se someten a ellas, montones. En busca de cierto ideal de belleza, someterse al bisturí, hoy en día, no es algo fuera de lo común. Pero hay casos que van más allá. Como el de la ex azafata alemana Martina Big.
En 2012, con 24 años, decidió dejar su trabajo en una aerolínea para convertirse en modelo. Para esto, gastó 50.000 euros (unos 35 millones de pesos chilenos) en una rinoplastia, relleno de labios, colocación de carillas en los dientes y en reducción de sus piernas, sus caderas y su cintura. No pocas intervenciones para alguien tan joven.
Pero Martina fue por más. Esta confesa admiradora de Pamela Anderson, se sometió a seis operaciones para aumentar su busto. Según informó a Cosmopolitan, se puso un tipo de implantes mamarios poco frecuente, que ella misma puede rellenar con una solución especial. Suena raro y riesgoso. Al respecto, la mujer aseguró a la revista: “Mi médico está controlando muy bien esto y obviamente es un proyecto interesante e inusual, pero no es peligroso”.
Actualmente es talla 70D de sostén, casi inexistente en el mercado de la lencería. La ahora modelo, indicó a InTouch que todavía desea aumentar su busto al doble, para luego intervenir otras partes de su cuerpo, como el trasero. Su objetivo, confiesa, era tener un aspecto extravagante. Pues no caben dudas que lo ha logrado.
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