Yvonne Gibney, de Merseysid, un condado al norte de Inglaterra, descubrió que su marido de hace 17 años se había casado en secreto con otra mujer en una ostentosa ceremonia que costó U$D 72 dólares. Se llevó esta sorpresa al ver fotos de la nueva pareja besándose en Facebook.
La mujer de 55 años, lo comprobó al encontrar fotografías que muestran al señor Gibney vestido con traje de novio y abrazando a la maestra Suzanne Prudhoe.
Pero Yvonne no fue a la única que le mintió. Gibney le dijo a su propia familia que ya estaba separado, que nadie lo sabía porque el divorcio fue en secreto, para salvaguardar la psiquis de su hijo. Engañados por un experto, todos celebraron junto a él su nuevo compromiso.
La señora Gibney llevó a su marido a juicio, y ante el tribunal dijo: “yo lo amaba incondicionalmente y creía que el amor era recíproco. Simplemente no tengo palabras para expresar el dolor y el sentimiento de traición que tengo. Debo aceptar que mi marido me fue infiel emocional y físicamente por un período prolongado de tiempo ’.
Entre llanto y destrozada añadió: “me enteré de la boda por unos comentarios en Facebook que me llevaron a su vez a otros comentarios, luego hice clic en el perfil de Suzanne Prudhoe y vi que su foto era del día de la boda y estaba besando a mi marido”.
El padre de tres hijos, y simulador casi profesional, se declaró culpable de bigamia ante la justicia. Y fue condenado a seis meses de prisión.
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